La gente moderna considera el café no sólo como una bebida, sino como parte de su cultura. Tomar café no sólo se ha puesto de moda, sino también saludable. El consumo moderado de cafeína puede tener un efecto positivo sobre la presión arterial y la salud vascular. Te ayuda a despertarte y permanecer despierto todo el día. Es importante recordar que no se recomienda consumir más de seis tazas de café al día ya que puede provocar problemas de salud.
Hay muchos tipos de café y es importante entender las diferencias entre ellos para poder elegir tu gusto individual.
A continuación se muestran algunos tipos de café:
1. Café descafeinado: Este tipo de café es apto para personas con intolerancia a la cafeína o problemas cardíacos. No tiene un sabor diferente al del café normal, pero contiene menos cafeína.
2. Grano: Es el café en forma de granos destinados a ser molidos. A menudo lo eligen quienes tienen su propio molinillo de café para conservar el aroma de los granos frescos.
3. Molido: El café ya está molido y listo para preparar. Es importante guardarlo en un recipiente hermético para conservar el sabor fresco.
4. Instantáneo (granulado): Este es un tipo de café artificial que se vende en forma granular. Marcas como Jacobs son representantes conocidos en esta categoría.
5. Instantáneo (en polvo): Este tipo de café se disuelve incluso en agua fría y suele considerarse uno de los más baratos.
6. Soluble (sublimado): Este producto se crea mediante deshidratación artificial y tiene una consistencia especial.
Todos estos cafés ofrecen una variedad de opciones para los verdaderos conocedores de esta increíble bebida.